Las palabras encerradas en carpetas de cartón querían salir volando, querían ser liberadas.Y todas esas palabras, deseosas de salir del lado oscuro y saltar por la ventana, consiguieron escapar al óxido y al polvo, al olvido.
Ellas, por fin, fueron libres de ser usadas o desusadas, leídas, interiorizadas o sencillamente transportadas.
Laura